El cazallero Santiago Beltrán, tercero en su categoría en la Titan Desert 2018

Entre el 29 de abril y el 4 de mayo el cazallero Santiago Beltrán ha participado en la Titan Desert 2018, la prueba de mountain bike por etapas más dura del mundo, que se desarrolla cada año en el desierto de Marruecos.
Santiago Beltrán ha conseguido quedar tercero en su categoría (master 50) en la Titan Desert 2018, una prueba con un recorrido de 620 kilómetros por el desierto de Marruecos. En la prueban han participado más de 600 deportistas, entre ellos ex ciclistas profesionales como Óscar Pereiro, Laurent Jalabert, Claudio Chiappucci, Roberto Heras, Abraham Olano o Melcior Mauri.
El cazallero no sólo se ha coronado en tercera posición de su categoría, si no que ha sido el nº54 en la general, con un tiempo de 29:06:45 y el segundo andaluz, sólo por detrás del Triki Beltrán, que también fue ciclista profesional.
“He cumplido un sueño”, comenta Beltrán a La Plaza Información, “mi objetivo era terminar la carrera, por lo que con la tercera posición, me siento más que satisfecho”, añade.

Santiago Beltrán practica bicicleta desde hace más de 20 años, aunque desde hace 4 compite en carreras de distinto nivel y se prepara mucho más a fondo. No en vano, ha conseguido importantes resultados en los últimos años, fue por ejemplo subcampéon de 2016 en el Campeonato de Andalucía de Ultramaratón BTT.

Para la Tintan Beltrán se ha preparado a conciencia, con un entrenamiento muy estricto: 6 días a la semana durante 5 meses. Ha trabajado con un nutricionista y con un entrenador específico, Javier Macías. “Me he dado cuenta que la gran dureza de la prueba es la intensidad con la que tu corres, por lo que es más fuerte la preparación psicológica que la física”, señala el cazallero, que tras la primera etapa en la que quedó octavo se vio con posibilidades de entrar en pódium y se exprimió al máximo para conseguirlo. De hecho subió al pódium en 5 de las 6 etapas.

Entre las etapas más duras, destaca la primera con salida y llegada en Boumalne Dades y con un itinerario de 115 kilómetros y un desnivel acumulado de más de 2.600 metros. También cabe reseñar la segunda y la tercera jornada de la prueba, en la que los ciclistas tenían que llevar todo lo necesario para pasar la noche en el desierto y dormir en él sin posibilidad de recibir asistencia externa.

Como anécdota curiosa de esta carrera Santiago Beltrán destaca, la asistencia que Melcior Mauri le prestó el tercer día. “Fue uno de los peores momentos, pinché y no llevaba bomba, nadie del grupo de cabeza se paró ayudarme, salvo Mauri, que me cedió su bomba”, destaca. En esos momentos Mauri era el tercero de la general y Beltrán, cuarto a 35 minutos de él. El cazallero le fue recortando este tiempo a lo largo de las siguientes etapas. En la etapa final necesitaba sacarle 5 minutos para arrebatarle el pódium. Beltrán no sólo logró reducir esos 5 minutos, si no que al final le sacó 20.

Tras esta experiencia Beltrán tiene como objetivo ser uno de los diez primeros en el campeonato de España y una vez terminando seguir practicando este deporte, que es su gran hobbie, pero ya alejado de la competición.